Parece mentira que siendo dueña del restaurante sea una persona tan desagradable con los clientes, debería mejorar su aptitud

Buen trato y buena carta de menu.

En una palabra: desastre. Servicio lento, nada atento y descuidado, con una camarera para todo el local. Muy baja calidad en la comoda: patatas congeladas, ensalada pobre e insipida y un solomillo a la pimienta cargadito de bolas de pimienta. Lo único salvable la cerveza, y porque no la fabrican en el sitio... Muy mala experiencia. Cómo dato curioso, en el servicio de mujeres en el mismo baño hay dos inodoros, no entiendo todavia el porqué... No sé permite pagar con tarjeta. No vayáis.

La cafetería como las piscinas son concesión del ayuntamiento, no quiero decir que a un amigo suyo pero... En lo que respecta a las tapas son malas, muy malas. Los trabajadores del local varían cada cierto tiempo y no son precisamente profesionales luego hacen lo que pueden y de seguro que con muy malas condiciones laborales. Ni se me ocurre comer o cenar hay, pero en el tía María tampoco que es el mismo perro con distinto collar.

una vergüenza de servicio, primero nos dicen que tenemos sitio para comer, aparcamos el coche(2min) ,volvemos y ya no hay(eramos 2para comer). nos conformamos con las tapas que tenian, asquerosas (ensaladilla, salchichas y bacalao) y mal servidas (nos las tiran a la barra). la terraza toda vacia y llena de vasos y servilletas, todas las mesas sucias. le doy una estrella porque no se puede dar menos.

Fuimos a cenar un grupo de 11 personas, sabiendo que íbamos casi no tenían productos suficientes. Comida congelada y sosa. No tenían nada para ofrecer de postre, salvo helados del bar, pero con la galleta pasada. Un vergüenza. Ahora sé porque estaba completamente vacío en plena Semana Santa.

Disponen de un menú diario a precio muy ajustado 9€ no se pude poner ninguna pega se esfuerzan por hacer las cosas bien.

Buen sitio para unas raciones