Un lugar extraordinario para fundirse con las tierras de Extremadura, buscar tranquilidad y un buen trato.

Mi madre y mi padre estuvieron el primer fin de semana de septiembre 2018, encontraron el lugar de casualidad un día que fueron a la codosera y han regresado de sus tres días de vacaciones encantados, un lugar precioso, la habitación amplia con un gran balconcito,el colchón es un lujo, un desayuno espectacular, los dueños encantadores, los perros son un encanto (y eso que mi madre al principio no le hacia gracia pero acabó encantada), la piscina genial también, le dan un 10 y están dispuestos a repetir, el lugar perfecto para desconectar y relajarse.

No falta ni un detalle a este maravilloso hotel rural, ni en el plano personal ni en el material. Un trato de lujo por parte de Mari y Lolo, un emplazamiento espectacular y unas instalaciones cuidadas con mimo y limpieza.

Es una casa preciosa el ambiente perfecto .La gente una maravilla.

Mari y Lolo se portaron de maravilla. La casa es una auténtica pasada, ideal para pasar unos días con la familia o los amigos. Volveremos seguro

Increíble trato por parte de Mari y su familia. Las instalaciones perfectas y el trato mejor. Volveremos y lo recomendaremos.

Perfecta casa rural, María y Manolo los encargados de todo en ella, súper amables y cordiales. Inmejorable lugar rodeado de naturaleza, gran piscina, habitaciones muy bonitas y amplias, camas de 2x2, desayuno con alimentos ecológicos. Lugar perfecto para pasar unos días en familia o con amigos.

Es un lugar ideal para descansar y desconectar unos días, un entorno rodeado de viñas, un río a escasos metros, dormir aquí es toda una experiencia de paz y tranquilidad. Las habitaciones son muy bonitas, el colchón te atrapada es buenísimo. Todo muy limpio. Y atendido siempre por los gerentes para cualquier duda o servicio que necesitamos, que además preparan un desayuno ideal. Muy recomendable.

El lugar es perfecto, rodeado de naturaleza, todo muy cuidado, la maravillosa piscina con su merendero y sus hamacas para pasar el día... Hay un hotel y dos casitas rurales, yo he ido varias veces y me he alojado siempre en las casas, no les faltan de nada, están nuevas, las camas comodisimas, el baño con columna de hidromasaje, barbacoa... Los dueños son super atentos y te tienen preparadas las camas y toallas, agua mineral, hielo... Y todo lo que les pidas. Te dejan llevar mascota, además ellos tienen allí. Y puedes disfrutar de un maravilloso desayuno preparado por Mari (la dueña) que da gusto. Recomiendo que lo visiten, pero no mucho a ver si va a estar ocupado cuando yo quiera volver a ir

Lugar espectacular para poder disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad